¿por qué tantas palabras?

Ciprés enclavado en la altura,
tu fortaleza suave ciñe
el viento
cuando la tormenta en llamas
arrecia
tu tronco fraguado torna en figuras
del tiempo
protectoras al infierno
tan temido por tus ramas.

Tan elevada es tu estatura,
mis brazos
no alcanzan tu rodeo,
los pies
se deslizan, resbalan
tierra y polvo, musgo y liquen,
en caída
hasta tu pedestal rabioso en raíces cincelado.
Y allí quedo
hospedada,
de barro mi cuerpo tullido,
enroscado en un puente
roto
que ruborizado escapa de tu sombra.

Ciprés...
tus hojas,
relojes del aire,
crepitan sagradas
un canto.
Mis dedos no llegan a la rugosa piel de savia,
no te tocan, no señalan...

Árbol de cima en nubes,
no te alcanza mi corazón de agua.

Comentarios

Leticia dijo…
quéee tesssxxxcccctooo!
celebro la llegada de esta princesa a nuestro sitial
Anónimo dijo…
cuaaaaaaaaaanta gente...no es por nada pero prefiero los de leto y danilo
Princesa Dariak dijo…
Gracias Leto por la bienvenida! es un honor participar en este blog junto a ustedes.

Lastima que ella ya no está, para qué responder al que no puede escucharte...
Anónimo dijo…
jajajajajajajajaja
Umma1 dijo…
Para Leto:
Entré a tu blog " La hora del lobo", me pareció una propuesta muy original. La abandonaste?
Chau

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