Muñecas

nunca me senté en la vereda
con el vestido almidonado
no dije alelí, gracias, perdona
nunca recibí rosas para mi cumpleaños
me gusta comer las papas fritas
con la mano y lamer
la cuchara del dulce/
las mejillas rosadas,
los ojos brillantes
la sonrisa a tiempo
me han sido vedadas.
Por eso guardo muñecas
que me muestran
la candidez inalcanzable.

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